Una conejita poco convencional grita “Yo no me amoldo a nada”. Escenas que recrean sexo que rompe roles a ritmo de claqué. Sado y bondage. Mujeres que penetran a hombres. Latigazos, dildos, frutas. Son algunas de las propuestas de la fiesta porno con la que el pasado sábado se presentó en Bilbao el proyecto Pulsiones SX, cuyo objetivo es deconstruir la concepción actual del porno desde las artes escénicas.

Las etiquetas y tabúes que rodean a las prácticas pornográficas limitan su disfrute y este proceso creativo de investigación busca romper con todo ello. El proyecto comenzó con una encuesta que pretendía conocer las opiniones de la población para poder ser representadas con diferentes performance. El plato fuerte será un espectáculo que se estrenará el próximo mayo en La Fundición de Bilbao. Pero no acabará ahí. Barbarina Dar Dar, actriz y directora de Pulsiones SX, así lo afirma: “El proyecto en sí nos pide que sigamos. Sentimos que es algo que la gente quiere pero que no pide en voz alta. Así que llegaremos todo lejos que sintamos que tenemos que llegar”

La primera presentación del proyecto se dividió en diferentes actuaciones porno que ironizaron con las concepciones típicas. Comenzó con la representación de una escena sado, siguió con una conejita poco tradicional que leyó en voz alta el cuestionario que rellenó el público: “¿En el porno encuentras lo que buscas o te amoldas?”, preguntaba el cuestionario. “Yo no me amoldo a nada”, respondía a gritos Barbarina. Se representaron también escenas  en las que se rompía con la tradicional concepción de “hombre” y “mujer” en el sexo mientras bailaban claqué. Mujeres que penetraban a hombres, hombres sumisos ante las mujeres. Latigazos, dildos, frutas. Todo vale para disfrutar del sexo.

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Todas las puestas en escena estuvieron ambientadas con la música y las imágenes del videojoker Arturo del Arco. La interacción con el público fue constante y el público respondió debatiendo, entre performance y performance, sobre lo que significa el porno o cómo debería deconstruirse. “Si el sexo es un tabú, el porno todavía mucho más”, comentaba una mujer del público. Más de medio centenar de personas se acercaron hasta el Hikaateneo a conocer de cerca la iniciativa y algunos de ellos, los más valientes, tuvieron la oportunidad de doblar películas porno.

“Pulsiones SX” busca hacer público el sexo, algo que hasta hace poco formaba parte de la esfera privada. “Queremos hacer públicos el porno y la sexualidad. Las prácticas sexuales son sociales y queremos representarlas desde la diversidad sexual. Se debería poder hablar de sexo en público y siempre respetando la diversidad de prácticas”, afirma Barbarina al finalizar el espectáculo. La iniciativa busca transgredir, hablar sin tapujos de lo que significa para cada uno de nosotros el porno, responder a ideas, filosofar y sobre todo hacer una crítica al porno actual. “Ha sido un proceso complejo. Sólo hemos ensayado dos semanas y pocos ensayos más nos quedan para la actuación definitiva. Ha sido una noche de mucha tensión”, confesaba sonriente Barbarina.

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