Viento de cambios y cine ‘queer’ en Myanmar
El Festival de Cine LGBT &PROUD Yangon busca en su segunda edición sensibilizar a favor de la diversidad sexual a la opinión pública de la antigua Birmania, donde el movimiento LGTB reclama la despenalización de la homosexualidad
Doña Ngwe Than lleva 15 años viviendo con su pareja pero hasta hoy no sabía lo que era salir de armario. Ni siquiera sabía qué era salir de su pueblo, una aldea de apenas 300 habitantes en el centro de Birmania. Hoy se encuentra a 400 kilómetros, en Yangón, la antigua capital y mayor ciudad de la también llamada Myanmar, un país del sudeste asiático que desde que cambió su nombre no ha hecho mas que eso: cambiar, últimamente a velocidad de vértigo.
A Ngwe Than le acompaña su pareja Win Ngwe y han venido hasta aquí para inaugurar la segunda edición del Festival de Cine LGBT &PROUD Yangon. Ambas son las protagonistas del corto documental ‘Almas Gemelas‘, una película salida de un taller de cine que el propio festival organiza para estrenar durante el festival.
La película retrata en 9 minutos la vida de esta pareja de mujeres que a sus 40 años llevan viviendo juntas desde hace 15. “Al principio mi madre se opuso rotundamente a nuestra relación porque éramos una mujer con una mujer”, comenta tímidamente Ngwe Than, “pero después vio que nos queríamos realmente y nos aceptó, lo que llevó a mis nueve hermanos a aceptarnos también”. Su pelo cepillo y su camisa señalan una expresión de género marcadamente masculina, pero Ngwe Than no es considerada socialmente como un hombre transexual sino como una mujer que adopta un rol masculino para vivir su relación con otra mujer.
Y esto se produce en un país en el que por ley están prohibidas las relaciones sexuales con personas del mismo sexo. El artículo 377 del código penal birmano tipifica como delito con una pena de hasta 10 años de cárcel las relaciones “antinatura”. Se trata de un legado colonial de la Inglaterra victoriana que sigue vigente en el país así como en India, Bangladesh, Pakistán, Sri Lanka, Malasia o Singapur, todas ellas antiguas colonias británicas. De hecho, India derogó la ley en 2013, pero volvió a instaurarla debido a su apelación. A comienzos de febrero de este año el Tribunal Supremo de India acaba de volver a abrir el debate sobre la constitucionalidad de la ley. Una esperanza que también contagia a Myanmar.
Aunque últimamente no se aplica la ley, algunas organizaciones como Colors Rainbow, que promueven la igualdad y los derechos LGBT en Myanmar, denuncian discriminaciones y arrestos arbitrarios, especialmente entre mujeres transexuales y hombres homosexuales. Hla Myat Tun, el coordinador de esta organización y uno de los organizadores del Festival de Cine &PROUD, explica el último caso que se hizo público. Se produjo en Mandalay, la segunda mayor ciudad del país. En 2013 un grupo de chicos gays y chicas trans fueron detenidos en una conocida zona de encuentros de la ciudad y posteriormente en comisaría fueron desnudados, golpeados y humillados en una operación en la que la policía alegaba hacer respetar el orden público.
El Festival &PROUD muestra de hecho en esta edición ‘She is a male’, un documental sobre aquellos hechos a través de la voz de Shint Thant, una joven de 26 años que, como ella define, nació como chico pero se siente mujer. Ella se alegra por un lado de que “los casos aislados y cada vez suceden menos”. Sin embargo lamenta que “el hecho de que exista la ley produce casos de extorsión y chantaje, que hacen que tengamos miedo y vivamos nuestra sexualidad en la clandestinidad. Estamos limitados a encuentros esporádicos, que en la mayoría de los casos se realizan sin protección, multiplicando el riesgo de contagio de enfermedades de transmisión sexual, incrementando la vulnerabilidad del colectivo”.
Shint Thant es activista, forma parte del colectivo Colors Rainbow y también está involucrada en la organización del festival. Su principal misión se ha convertido en recorrer el país informando sobre los derechos LGBT como derechos humanos, además de explicar las diferencias entre orientación sexual e identidad de género, algo que la gente en Myanmar todavía no tiene muy claro, ya que hablar sobre ello en este país es un tabú.
Myanmar es un país mayoritariamente budista y Shint Thant recuerda que algunos textos budistas mencionan explícitamente que las relaciones entre personas del mismo son una “abominación”, lo que contribuye al estigma e influencia a la sociedad. “Pero el género y la orientación sexual no debería marcarla la religión o la sociedad, sino el sentimiento interior de cada persona”.
Tanto Hla Myat como Shint Thant coinciden en que el Festival de Cine LGBT &PROUD Yangon pretende elevar la voz del colectivo para anular el estigma entre la sociedad e influenciar al futuro nuevo gobierno para que derogue la ley. De hecho, en un principio esta edición del festival estaba programada para mediados de noviembre, justo una semana después de las históricas primeras elecciones verdaderamente democráticas celebradas en el país. Debido a la incertidumbre que suscitaban los comicios, los organizadores decidieron retrasar su celebración.
Ganarse a la opinión pública
Myanmar es un país en plena ebullición. Los cambios se ven de un día para otro. Tras casi 60 años de terrible dictadura, en 2010 la Junta Militar decidió acabar con el aislamiento y ponerse al frente de un gobierno semi-civil. En realidad todavía gobiernan los mismos militares, vestidos de paisano, pero las elecciones del pasado noviembre dieron un vuelco a esa situación y el partido de la Premio Nobel de la Paz birmana, Aung San Suu Kyi, arrasó con el 80% de los votos.
El Festival &PROUD duró 4 días y justo un día después, el lunes 1 de febrero, se formó el nuevo parlamento birmano con la reformista Liga Nacional para la Democracia al frente por aplastante mayoría, gracias a ese icónico estandarte en el que se ha convertido Aung San Suu Kyi, que aspira a ser la futura presidenta.
Uno de los miembros del partido ganador está invitado al festival a participar en una mesa redonda. La charla se produce dos días antes de convertirse en diputado del nuevo parlamento. Durante el encuentro, U Min Thent Htut debate sobre las posibilidades que tiene el futuro gobierno de cambiar la ley. En un principio el partido no lo ve como una prioridad, “aunque sí es una necesidad a largo plazo y algo que el partido se planteará intentándose ganar progresivamente primero a la opinión pública”.
Con esa misión de poner a la opinión pública a favor de la causa, viene &PROUD con su cine. A pesar de los cambios de los últimos años, en Myanmar todavía se produce muy poco cine y prácticamente ninguna historia que retrate la vida de la comunidad LGBT es llevada a la gran pantalla. Por este motivo los organizadores de &PROUD se propusieron traer al país historias de cine con esta temática y además también hacerlo.
Por eso, junto a ‘Almas Gemelas’, en la noche de inauguración del festival también se muestran ‘Canal G‘ y ‘Querida Mama‘ , historias de lesbianas, gays, bisexuales y transexuales birmanos producidas por miembros de la misma comunidad. La iniciativa que los organizadores de &PROUD han llamado ‘Rainbow Reels’ es un taller de creación de cine documental en el que 10 jóvenes tienen un mes para aprender la mejor manera de contar en cine la experiencia de un personaje con una sexualidad diferente y que todavía es un tabú en su país. Esas tres películas son el resultado.
La experiencia de un joven homosexual que descubre cómo ligar con otros chicos a través de su nuevo smartphone; y la videocarta con la que una adolescente sale del armario y le cuenta a su madre a través de la cámara con sentimiento de culpa cómo se ha enamorado de otra chica, son las historias ‘Rainbow Reels’ que acompañan al romance “antinatural” de Ngwe Than y Win Ngwe. Esas tres historias y otros 32 títulos entre cortos y largometrajes, documentales y películas de ficción, han convertido el recinto del Instituto Francés de Yangón durante cuatro días en un espacio de libertad, tolerancia y aceptación, sin censuras. Especialmente sin censuras.
Hla Myat explica que sería imposible organizar el festival en un lugar público: “El cine en Myanmar continúa sometido a censura. Sin embargo, el Instituto Francés es un recinto diplomático. Nos encontramos en territorio francés y por eso podemos disfrutar de esta libertad”.
&PROUD Yangon es mucho más que un simple festival de cine, y no sólo por las luces de colores que han invadido hasta los baños, o la bandera arco iris que envuelve la estatua de la Torre Eiffel del Instituto Francés de Yangón, sino porque además de cine, el programa también incluye charlas, mesas redondas, actuaciones, fiestas con DJs, conciertos con estrellas de la música birmana y hasta una noche dedicada al cabaret con espectáculos que combinan cine, música y actuaciones de drag queens. Una fórmula que ha hecho que pasen por el festival algo más de 3.500 personas durante todo el fin de semana.
“La idea es llevar el festival a otras ciudades”, sueña Hla Myat cubierto de purpurina. “Nuestra situación fuera del Instituto Francés desgraciadamente todavía es bastante desfavorable. Pero mira esto, el país está abriéndose y cada vez disfrutamos de más derechos. Se ha avanzado bastante en derechos humanos y comenzamos a parecer una democracia. Los derechos de lesbianas, gays, transexuales y bisexuales no pueden quedar atrás ya que también son derechos humanos y esta libertad tenemos que contagiársela al resto del país”, concluye.
La directora de ‘Almas Gemelas’, Lei Lei Aye, sube al escenario de &PROUD junto con Ngwe Than y Win Ngwe, tras la proyección de la película. El festival ha comenzado. La timidez hace que las tres se escondan una detrás de otra hasta que se apagan los aplausos. En ese momento todo cambia y lo que se esconde es su timidez para explicar que durante muchos años han vivido con miedo de la gente y se han negado a mostrar su amor en público. Sin embargo sienten que esta película les ha devuelto la dignidad. Les ha vuelto incluso populares en su entorno y la gente las saluda ahora con respeto y admiración.
Lei Lei Aye pregunta al público y a sí misma con una orgullosa sonrisa: “¿Y qué es antinatural? Miren su amor. ¡Sería genial si pudiéramos mirarlas como una pareja que se quiere sin etiquetas de natural o antinatural!” Y mientras termina la frase, Ngwe Than mira a Win Ngwe y de esa mirada saltan chispas.