¿Sabías que la Semana Santa andaluza tiene raíces negras?
Hasta ahora, la cultura andaluza más reivindicativa había pedido reconocimiento a su identidad gitana, judía y musulmana pero en los últimos años varios proyectos e iniciativas están intentando recuperar la memoria negra de Andalucía, aún más invisibilizada por la Historia oficial.
El propósito de los reduccionistas discursos binómicos es, en parte, generar mentiras en torno a cuestiones que pueden resultar, de entrada, obvias. Mentiras que nos llegamos a creer profundamente y que aceptamos como “la verdad” como las que nos dicen que los pueblos y las identidades oprimidas no han aportado a la Historia oficial por el mero hecho de haber sufrido opresión. Como si quienes siempre han resistido no hubieran dejado marca o huella en los territorios que han sido habitados por elles. ¿Es acaso esto posible? ¿Es posible cuando esas identidades han estado durante siglos en tu tierra?
Es lo que ocurre con la historia del pueblo negro en Andalucía, que está totalmente invisibilizada, que no se cuenta, a pesar de que la comunidad autónoma ha tenido y tiene unas innegables raíces negras. Para muestra un botón: Cádiz capital fue la ciudad con mayor presencia de población negra en situación de esclavitud del Estado español. La población negra conformaba el 20% de la ciudad gaditana. ¡El 20%! Pero eso no es todo: ¿Sabías que en ciudades portuarias andaluzas la población negra llegó a ser del 10%? ¿Sabías que tenían una fuerte presencia en Málaga y que en Sevilla llegaron a ser seis mil personas en situación de esclavitud durante el siglo XVI? ¿Te hubieras podío imaginar que en la ciudad gaditana de Sanlúcar de Barrameda casi la mitad de la población era negra? ¿Que de cada mil habitantes, 420 eran afrodescendientes sanluqueñes? ¿Y que el 22 de enero de 1951 falleció en El Puerto de Santa María (Cádiz) la última vecina portuense (Cándida) que nació bajo la condición de esclava? Sí sí… hace poco más de sesenta años… ¿Sabías que barrios de Huelva como el barrio de Valdelatas de Gibraleón recoge la mayor concentración de andaluces (en neutro, ¿eh?) afrodescendientes que hicieron allí su vida después de la liberación?
Apenas se conoce esta parte de historia andaluza a pesar de que la cultura y la presencia negra habita por estas tierras desde la segunda mitad del siglo XV. A partir de ahí y hasta el el siglo XIX lo hicieron bajo la condición de “personas esclavas”. La respuesta a esta silenciamiento se llama “racismo institucional”. Todos estos datos son los que se aportan en el documental La historia silenciada. En éste, Alfonso Franco, Catedrático de la Universidad de Cádiz, asegura que fueron cuatro siglos los que Andalucía contó con presencia masiva de población afrodescendiente en situación de esclavitud; la mayor concentración del Estado español.
Todo cuerpo en contacto con la tierra genera un impacto cultural, social… una huella que negamos con el cuento de la desaparición, la mentira de la expulsión… El cuento de que el pasado no tiene conexión alguna con el presente. De que lo que somos es una individualidad desconectada de la memoria, las colectividades y las historias. El cuento del individualismo extremo, de los capitalismos que hacen caja quitándote tus raíces, tus colchones de apoyo emocional, tu historia colectiva. Pero las personas estamos hechas de historias, somos los relatos que nos cuentan y los que no. Y sólo si conseguimos conectar con la idea de un tiempo pasado que es presente, de un futuro que puede estar gestándose ahora (latente) podremos ser, además, catalizadoras de historias.
No eligieron llegar pero vinieron y fueron
Pocos relatos accesibles recogen la huella de la cultura africana en Andalucía aunque se usaron sus cuerpos durante siglos para levantar obras públicas, afrontar cuidados y trabajos del hogar, hacer trabajos de artesanía, de tabernas, minería… Eran mano de obra en todo tipo de trabajos, también mano de obra para la Iglesia y los conventos. Las propias monjas contaban con mujeres negras bajo situación de esclavitud como asistentas… La antropóloga Aurelia Martín defiende además en este artículo de El País que los hombres no eran más valorados que las mujeres en las compra-ventas de de personas esclavas. Al contrario: “Los hombres eran más baratos en el mercado que las mujeres, puesto que éstas podían hacer todos los trabajos duros de una casa, cocinar, traer el agua, la leña, la comida y servir de placer sexual”. En presentaciones públicas, Martín ha comentado además que estos abusos hacia las mujeres negras hizo muy posible el mestizaje ya que difícilmente -y debido a los duros trabajos que afrontaban- las personas esclavas podían relacionarse sexualmente entre así, aunque hay registrados algunos matrimonios de casos concretos. Otro dato importante que destaca la antropóloga es que no sólo la clase alta vivía con personas esclavas, lo que desmonta el mito de que la esclavitud sólo era promovida por personas con cierto estatus.
La población negra fue la inmensa mayoría esclava en Andalucía pero no fue la única: también hubo “presencia esclava” de Canarias, de Turquía y del norte de África, aunque, según estas fuentes, mucha menos.
En Granada no hizo falta pues la Corona de Castilla se encargó de convertir a la propia población andalusí (morisca y bereber) en esclava tras la sublevación morisca, hecho que se produce contra la Pragmática Sanción de 1567, que limitaba las libertades culturales que la Corona juró respetar cuando se le entregó el Reino de Granada. Esto posibilitó, según el documental que la esclavitud en Granada pasara de un 5 a un 14%. Supuso también quitar sus riquezas a un pueblo que, años atrás, había sido pueblo legítimo de Andalucía. Además de esto, el negocio estaba en que la familia de personas moriscas y bereberes esclavizadas podían pagar para que liberaran a sus familiares.
Con todo, todavía las personas esclavizadas en Granada tenían la condición de humanas: sus cultos y costumbres eran el problema para la Corona. No gozaban de la condición de “humanas” las personas negras, a las que prácticamente consideraban animales.
La riqueza y la musicalidad de la Semana Santa andaluza
Durante siglos y también ahora, la población negra andaluza ha dejado su arte, sus costumbres, sus formas de ver el mundo, sus trabajos… en la tierra. Éstas se mezclaron con las ya existentes. Un dato curioso es el que rescata el documental Gurumbé, en el que se habla de la aportación de esta población al propio flamenco. El autor Antonio Manuel habla además de que el flamenco es la historia silenciada de pueblos perseguidos en Andalucía como el gitano y el morisco. Así, el cante flamenco tiene que ver con un rezo que se prohíbe, con lamentos que no pueden ser cantados… es la memoria sufrida de todo un pueblo. El propio Antonio Manuel (autor de La Huella Morisca) asegura que la palabra “flamenco” es árabe (andalusí en este caso) y significa “campesino errante” que es “Felah-Mengus”. Os recomendamos visitar las cuevas del Sacromonte en Granada que son consideradas la cuna del flamenco ya que es ahí donde hicieron comunidad los pueblos andaluces (andalusíes) perseguidos: tantos éstos como el pueblo gitano. Pueblo campesino… ¿os suena?
Pero la aportación cultural no se queda ahí. Además de lo que podemos desconocer, está registrado el fuerte legado dejado por la población negra andaluza a la idiosincrasia de su Semana Santa: algo que hace que la fiesta andaluza sea percibida de manera especial tanto aquí como en el extranjero. Lugar de atracción de turismo y de personas curiosas. En este proyecto insistimos que en Andalucía los cultos religiosos son más que eso… Lo lúdico y religioso fue a veces la única manera de volcar las costumbres prohibidas de muchos pueblos. Cuando a los victimarios no les servían les andaluces afrodescendientes, los dejaban “libres” y las cofradías eran lugar de recogida para muches de elles. El Catedrático en antropología social y cultural, Isidoro Moreno tiene un extenso trabajo al respecto. Éste cuenta que las cofradías, además de ser un lugar para paliar la situación en la que se quedaban las personas que habían sido esclavas, éstas las usaban para rivalizar con sus “expropietarios” volcando todas sus dotes culturales para que sus pasos de semana santa lucieran más y fueran mejores. Hermandades de Cádiz, Jaén, El Puerto de Santa María y Sevilla tenían fuerte presencia de esta población andaluza. La hermandad de Los Negritos de Sevilla tiene este origen y comenzó siendo únicamente de hermanos andaluces negros.
Asimismo, las cofradías -según Moreno- fueron usadas por pueblos oprimidos como lugar de resistencia por lo que eran percibidas por las personas blancas que manejaban como peligrosas: el pueblo oprimido tenía posibilidad de hablar y hacer estrategia en un espacio donde el intercambio de experiencias y de historias se producía.
Mezcla, intersección y ¿casualidades?
La vecina Dolores González del barrio de Villalatas de Gibraleón (Huelva), dice en el documental: “Aquí casi tó el pueblo es moreno pero uno es más rubio y otro es más blanco”. “Moreno” es como se conoce en este pueblo a las personas afrodescendientes andaluzas (provenientes tanto de la esclavitud española como de la portuguesa). Otros términos más despectivos para definirles son “travesaos”, o “atravesaos”. En el barrio se han mezclao y han convivío con familias gitanas y ambas reciben los estigmas sociales impuestos desde la ideología de “pureza” del ideal nacional-católico. Seguimos sin profundizar en frases tan populares como la de “no se sabe dónde empieza lo gitano y acaba lo andaluz”, que sin duda esconden una sabiduría sobre el pueblo andaluz y sus siglos y siglos de mezcla. Tras el apoyo a abolir la esclavitud que dio la Ilustración, toda la población “afroandaluza” fue liberada. Algunas teorías confirman que, debido a la mala vida de las ciudades, se dispersaron en pueblos.
¿Casualidad o causalidad es que Sanlúcar de Barrameda -un pueblo que tuvo una de las mayores concentraciones de población negra andaluza sea el pueblo del Estado español con mayor número de personas en riesgo de exclusión social? ¿Casualidad o causalidad es que la Virgen del Rosario de Cádiz -que fue integrada por la población negra de la ciudad- haya sido nombrada con el paso del tiempo Patrona de la Tacita de Plata? ¿Casualidad o causalidad es que, según el SAT, el 50% de toda la tierra en Andalucía esté en manos de un 2% de personas propietarias? ¿Bajo qué procesos históricos se ha producido esto? ¿Quién es la clase obrera y jornalera andaluza? ¿Qué orígenes tienen los barrios más maltratados y en mayores contextos de vulnerabilidad? Y, lo más importante, ¿dónde empieza en Andalucía lo “no blanco” y dónde acaba lo andaluz, y cómo afecta la invisibilización de este pasado que es presente al pueblo negro que vive en Andalucía y a las identidades andaluzas afrodescendientes (reconocidas o no)?
+En:
Pa profundizá (no estamos de acuerdo con tó los enfoque pero pa tirar de hilo):
El gen negro de los andaluces.
Gurumbé. Canciones de tu memoria negra.
Historias de “Los negros curros“.
Esclavitud, mestizaje y abolicionismo en los mundos hispánicos.
Historia de la Hermandad de “Los negritos”.
“Hermanad de los negritos” en la serie “La Peste”.