¿Cuales son las demandas laborales de las mujeres trabajadoras de hogar y de cuidados? ¿Existe voluntad política de querer atender dicha demandas?

Estas son algunas de las preguntas que el programa O no será, de Hala Beli, hace a Silvia Carrizo de la asociación Malen Etxea, una organización sin ánimo de lucro, que trabaja por la igualdad y la defensa de los derechos humanos de las mujeres migrantes, en las entrevista. Entre otras cosas, analizan la importancia de ir a la huelga general de Euskal Herria el 30 de enero.

La situación de las trabajadoras internas ya fue abordada en un reportaje en el que se exponía que este trabajo tiene muchas similitudes con la esclavitud. “Trabajan más de 60 horas semanales, por más que su contrato (cuando hay contrato) indique 40. Su salario está muy lejos de ser mileurista, están disponibles día y noche, viven sin intimidad en su puesto de trabajo y se quedan en la calle sin derecho a paro cuando la persona a la que cuidan fallece o la familia decide dejar de contar con ellas. Las empleadas del hogar internas —en su mayoría migradas— enfrentan condiciones de semiesclavitud y un trato marcado por las relaciones de poder racistas, clasistas y sexistas”, arrancaba el texto.

Lee también…