Comerte el coño, como lo oyes
Nos queda poesía y nos quedan ganas de follar "entre las paredes del confinamiento, la desobediencia, la enfermedad y la muerte"
echar un polvo ahora
saltarnos todo y follar
entre las paredes del confinamiento, la desobediencia, la enfermedad, y la muerte
echar un polvo ahora
con todas las consecuencias
follar hasta el amanecer
dar gracias al confinamiento
ver a través del amor
trozos de mundo que han muerto
follemos
que salten las alarmas, y resuenen las cacerolas
que nos tiren piedras
que nos insulten…
follar sólo para verte
debajo de la piel
dormida en tu sangre
follar solo para ver nacer los ciclos de los días
para renovar la piel
follar para follarte
que no quede un racimo de oscuridad
o que la oscuridad nos sea grata
follar para avisarnos
que tal vez mañana
(lo más seguro)
vengan a buscarnos.
“Letanía”
Estoy hasta el coño
hasta la breva
hasta el higo
hasta la garganta
hasta la voz
Estoy hasta las tetas
hasta el ombligo
hasta la nevera
hasta la puerta del baño
Estoy hasta el coñísimo
hasta la santa madre del divino coño
hasta el coño del real decreto de las leyes de su mismísima voluntad
Estoy hasta la voluntad de la vecina,
del hijo y del padre, y del espíritu santo de los balcones
Estoy hasta la profundidad de mi vagina de tu recuerdo
hasta todas las cavidades de ti
Estoy hasta la punta del clitoris del facebook
hasta el real decreto del 55 de la santa teta
Estoy hasta el imperialísimo
hasta la nuez de mi.
Me gustaría comerte la boca y el coño
primero la boca
después el coño
llegar hasta ahí dando círculos en forma de nube
llegar hasta ahí como quien llega a la cima de un pico
como quien conduce millones de kilómetros hasta llegar
como quien ve (incrédula) que el mar se abre y que los milagros existen
Comerte el coño como única finalidad de esta pandemia
comértelo hasta que los días se mezclen y no sepamos a qué mundo pertenecemos
Comerte el coño con la boca
con los dedos de los pies
apretando las ganas de llegar
para no perder de vista ni un sólo milímetro de piel
Comerte el coño
como lo oyes.