El caso de Charo y los desahucios sistemáticos en los barrios de Madrid

Rosario Gómez-Limón, de 76 años, es una superviviente del patriarcado y del capital, y en este momento vuelve a ser atacada sin que el Estado responda responsablemente.

Texto: PAH Vallekas

21/12/2022

Charo, en el sofá de su casa. / Foto: PAH Vallekas

La vivienda digna se ha convertido, en la ciudad de Madrid, en un bien de lujo que pocas se pueden permitir. El proceso de gentrificación avanza sobre la ciudad a pasos agigantados y, mientras tanto, derriban casas de compañeras y desahucian a nuestras vecinas. Es el caso de Charo, Rosario Gómez-Limón, de 76 años, que vive en Puente de Vallecas, un barrio muy apetecible hoy para inversores y especuladores. El pasado miércoles 14 de diciembre, PAH Vallekas logró la suspensión del lanzamiento de Charo en la puerta de su casa, en plena Avenida de la Albufera. A pesar de la vigencia del Real Decreto-ley 11/2022, de 25 de junio, por el que se prohíben los desahucios hasta el 31 de diciembre, de inicio estaba previsto un intento de desalojo el 22 de diciembre; finalmente, será el 11 de enero de 2023.

Charo fue desahuciada de la vivienda en la que llevaba viviendo más de 60 años de alquiler, el 18 de octubre de 2018. Este desahucio supuso una resolución condenatoria contra el Gobierno español del Comité de Derechos Económicos, Sociales y Culturales de Naciones Unidas. Teniendo en cuenta que su pensión asciende a 300 euros, la okupación ha sido la herramienta mediante la que defenderse de la violencia. De no ser por la acción de recuperación de viviendas vacías de la Obra Social de la PAH, hace tiempo que Charo se habría quedado sin casa. Por si fuera poco, el marido de nuestra compañera la maltrataba y la precariedad le hacía imposible encontrar una salida. Su pertenencia a la PAH, el acompañamiento de sus compañeras y el hogar que Charo lleva cuidando desde hace dos años, le han dado la oportunidad de poner fin a esa relación de abuso. Charo es una superviviente del patriarcado y del capital, y en este momento vuelve a ser atacada sin que el Estado responda responsablemente. Las instituciones, de nuevo, muestran muy poco interés por una mujer mayor, pobre y discapacitada.

Nuestra compañera se ve de pronto sin una alternativa de vivienda digna, para recibir el invierno, y en pleno proceso de recuperación de un cáncer de mama. Actualmente, su movilidad se ve reducida y acude diariamente al centro de salud de su zona para las curas que necesita. La crisis sanitaria que atraviesa la Comunidad de Madrid vuelve terrorífica la posibilidad de quedarse en la calle o de alojarse durante dos noches en un albergue, no solo por las pésimas condiciones de subsistencia, sino porque no puede prescindir de la atención sanitaria a la que accede desde su vivienda.

La situación de Charo nos llena de rabia y, ante la completa desatención estatal, responderemos con organización vecinal. Exigimos soluciones dignas, que se tomen en serio la violencia estructural y garanticen el bienestar de Charo. Denunciamos con furia y tristeza que el Gobierno consienta que nuestra compañera y centenas de familias se queden sin un techo. Llamamos a que todas vosotras vengáis a apoyarnos el día 11 de enero frente a la violencia policial y la acción del capital, y a que os suméis a la lucha por la vivienda digna. ¡Charo no estás sola, estamos contigo!