Nuevo monográfico de Pikara Magazine, sobre deporte, ya en preventa.

“Si me dices que ser feminista es que un hombre y una mujer se merecen las mismas oportunidades, soy feminista”, decía hace unos días el tenista Rafael Nadal, en una entrevista con Ana Pastor en La Sexta. Y luego vino el matiz, el “pero” que muchas veces estropea lo dicho previamente. “Y la igualdad no reside para mí en regalar; la igualdad reside en que si Serena Williams genera más que yo, quiero que Serena gane más que yo”, añadía. Y lo decía días después de fichar como embajador de la Federación de Tenis de Arabia Saudí, por si alguien se despista, país que viola los derechos humanos y donde las mujeres no tienen las mismas libertades y derechos que los hombres y donde se da latigazos a las personas LGTBIQA+. Por si alguien se despista, esto de ser “embajador” implica cobrar millones de euros. ¿Se los regalan o los está generando?

Cuando nos pusimos a pensar en el monográfico de Deportes, allá por finales del año pasado y que ya se puede adquirir en preventa, nunca tuvimos en la cabeza a Rafa Nadal, pero sí a Laia Palau, a quien hemos entrevistado.

“Mi palmarés y mi trayectoria en el mundo del baloncesto es similar a la de otros y no he percibido, obviamente, el mismo salario. Como estamos en una sociedad capitalista y tenemos que sacar siempre un rédito de lo que hay que vender, de lo que hay que generar, si tú no pones estructuras para que ese producto se venda, para que sea chulo, para que la gente hable de ello, obviamente no vas a sacar un rendimiento. Entonces siempre va a estar cobrando más un hombre que una mujer porque no estás invirtiendo”, respondía a Palau a Nadal en otro programa de televisión.

En la entrevista realizada por Pikara Magazine y que forma parte del nuevo monográfico, la exjugadora de baloncesto afirma: “Todo lo que yo he hecho ha sido con peores condiciones que cualquiera de mis compañeros, peores profesionales a mi servicio, peores instalaciones, peores horarios, peor viaje, peor dinero, peor todo”. Por cierto, el palmarés de Laia Palau es de 33 títulos con sus equipos y 12 medallas con la selección.

En el monográfico de Deportes también hablamos de Serena Williams, porque pensamos en ella y no en Nadal cuando hicimos la planificación. Escribe Lucía Mbomío que, cuando nació la primera hija de la tenista, escribió un mensaje en redes en el que le deseaba que no la insultaran por el hecho de tener unos músculos prominentes. En el mismo artículo se recuerda que, en una encuesta de un tabloide británico, uno de cada ocho hombres afirmó que podría ganarla. A Serena Williams. Perdón, pero tengo que escribirlo, ¡cuánto flipao!

“La igualdad no reside para mí en regalar”, dijo Nadal. Pero, ¿en qué reside la desigualdad? Cuenta Olatz González Abrisketa en el libro Raquetistas. Gloria, represión y olvido de las pelotaris profesionales que a partir de 1917 las mujeres llenaban frontones, pero en los años 70 y 80 este deporte empezó a decaer y se tomó la decisión de que las modalidades masculinas estuvieran “ampliamente subvencionadas”, no así las femeninas. La pelota masculina dejó de ser rentable, pero sobrevivió gracias a las ayudas públicas. De esto también escribimos en el monográfico de Deportes.

Y de racismo, y de activismos, y de prácticas deportivas que rompen con los binarismos, y de gordofobia, y de personas intersex, y de los beneficios del ejercicio después de una mastectomía doble, y de identidad, y de individualismo, y de atletismo y baloncesto, y entrevistamos a Ana Pastor, pero a la autora de #Chandaleras.

Ah, el reciente estudio ‘Actividades físicas y deportivas para las adolescentes: necesidad, barreras y recomendaciones’ recoge que hay relevantes desigualdades de género en la utilización de los lugares de práctica físico-deportiva: “Los chicos ocupan mayoritariamente los más accesibles, espacios urbanos (40 por ciento vs. 27 por ciento de las chicas) y de recreo escolar (29 por ciento de ellos vs. 6 por ciento de ellas)”.

Si los patios escolares generan expulsiones en lo micro, los grandes eventos deportivos expulsan a miles de personas. De esto también hay un reportaje. No te pierdas este monográfico, con ilustración de portada de Susanna (Zuz) Martín, que cuesta solo 5 euros. Casi regalado, así que a Nadal no le va a gustar.