Por:
Coordinadora de Grupos de San Francisco, Bilbao la Vieja y Zabala
SOS Racismo – Bizkaiko SOS Arrazakeria

Estamos ante una escalada de la violencia racista en nuestros barrios. Y necesitamos hacer frente a estos ataques, de manera colectiva, por unos barrios sin violencias racistas. En los últimos días hemos sido testigos de una serie de acciones racistas que incitan al odio, contribuyen a la desinformación y a la estigmatización de las personas migradas, racializadas y gitanas.

Denunciamos con preocupación los panfletos que están metiendo en los buzones de Bilbao con amenazas de muerte explícitas y racismo categórico violento contra personas menores de edad. Además, con discursos que solo generan odio y ponen el foco en la estigmatización de las personas migradas y racializadas.

Las pintadas fascistas: en los últimos días en las calles de San Francisco han aparecido pintadas racistas contra las personas negras, deshumanizándolas y generando odio.

El ataque a fachadas, sumado a lo anterior, han aparecido rotos los cristales de una mezquita y atacada una persiana LGBTIQ+ y en una entidad de intervención social con pintadas neonazis, donde además se han coreado consignas fascistas.

Denunciamos la brutalidad policial: hace unos días, vecinas y vecinos del barrio San Francisco fueron testigos del despliegue y de la brutalidad policial ejercida contra personas migradas y racializadas en la Plaza Corazón de María. Además del comunicado
emitido por el sindicato de policía ESAN en el que se estigmatiza, criminaliza y deshumaniza a las personas y que pretende generar aún mayor violencia.

No nos quedaremos calladas, seguiremos denunciando estos abusos porque son prácticas racistas y que atentan contra los derechos de las personas racializadas y migradas. De igual forma, contra los derechos de todas las vecinas y vecinos que quieren un barrio tranquilo y libre de racismo. Exigimos que se respete la dignidad y la integridad física de todas las personas, independientemente de su origen étnico, identidad y orientación sexual, religión y circunstancias. Es una responsabilidad institucional y política ante estas prácticas que están sucediendo a diario en nuestras calles.

Aquí estamos. Somos antifascistas, somos antirracistas. No pasarán.