Archivo de la autora
Ylenia es verdad
Hoy por hoy sé exactamente qué es lo que admiro de Ylenia Padilla y lo puedo enumerar sin que me tiemble la voz. En cada programa de lo que 'noséquién' llama Telebasura, yo encuentro referentes (televisivos terrenales). Mujeres que hablan sin tapujos, generalmente bastante alto y parecen no temer a nada. Mujeres que saben reírse de sí mismas cuando ven que la han liado parda.
Victorias de las ladronas victorianas
Si alguna vez te ha dado por estirar el brazo y hacerte amiga de lo ajeno (¿acaso existe alguien que esté libre de pecado?) estoy convencida que te va a fascinar esta curiosa estampa del siglo XIX.
Nola heldu naiz ni honaino
Kattalin Miner idazle trebeak broma serioen artean aktualitatearen erretratuaren deskribapen zehatz bat egin du. Oso dibertigarria egin zait ibuprofenoak egunero gozokiak balira bezala jan, erre, kafea edan, bere kotxea gidatu, tabernaz taberna joan eta 'best sellerrak' irakurtzen dituen bere protagonista ezagutzea. Lagun berri bat egin duzula sentituko duzu.
Somos malas feministas, podemos ser peores
Roxane Gay no quiere que la coloquen en un pedestal feminista. María Unanue tampoco. Por eso se ha identificado con este libro y lo considera "la Neobiblia de las chavalas de a pie que no aspiramos a ser coherentes en absoluto".
‘Frikismos’ adultos
'Busco una actriz adolescente de 12 -16 años que sea gordita o tenga alguna característica especial, algún frikismo por el que le puedan hacer bulling. También busco otra actriz adolescente 12-16 años que sea guapa. Por favor, interesados enviad foto, cv y videobook. Es para un proyecto televisivo que empieza en Mayo. Muchas gracias'. María Unanue analiza las implicaciones de esta oferta de trabajo difundida por la productora Globomedia.
París era mujer
Este es el libro que necesito que conozcáis, quiero dejar muy claro que no lo he escrito yo, sino Andrea Weiss. Cuenta en sus 270 páginas la historia de un grupo de mujeres y bolleras hoy en día prácticamente desconocidas e invisibilizadas.
Belén Gopegui es mi búnker
Esta novelista se convirtió en mi ansiolítico cuando tenía demasiado estímulo no deseado alrededor. Si la gente que te rodea te agota, abres el libro y dices que tienes que estudiar.
Ana Elena (vale mucho la) Pena
'Vamos a follar hasta que nos enamoremos': esta joyita es un poemario ligero y profundo, corto y largo, bonito y feo como la vida, que en 68 poemas retrata los pensares de cualquiera que tenga cabeza sobre los hombros.
Las panzas subversas
Magdalena Piñeyro por fin nos ha deleitado con lo que muchas veníamos rogando que pasara: ha escrito un maravilloso libro que ordena y estructura el discurso del movimiento gordo en español.
Amor
Mi nueva razón de vivir son un puñado de gordas que me traen por el camino de la dulzura. Cuando nos conocimos, se dio esa impresionante conexión que te hace sentirte hermanada. Fue la rehostia. Como si nos conociéramos de siempre. Como si lleváramos toda la vida queriéndonos.
La cerda punk
“Este libro es un brillo insumiso que irradia la grasa de una proletaria de la belleza y la salud para reventar los moldes del pensamiento normativo”. Así empieza este libro que debemos comernos a cucharadas para desayunar. Y, mientras leía ciertas líneas sobre “la excesividad” entre las gordas 'femme', me sentí afortunada de formar parte de un nuevo grupo: las que no sabemos pasar desapercibidas.
¿La vida bucólica es la vida mejor?
Quiero pedir un fuerte aplauso para esas personas que deciden pasar de malos humos y cláxones, por haberse marchado a coexistir con vistas a las estrellas, tomates no transgénicos, pasifloras y leña para el invierno. Yo lo he intentado, pero en este momento no ha podido ser.
Sobre-peso, y sobre-no-peso
"Sé que toda esa gente que nos valora más cuando somos menos gordas, lo hace por nuestro bien y nunca porque los estándares de belleza del siglo XXI actuales les influyen. Sé que los comentarios por mi salud, no son gordofobia sino consejos responsables". María Unanue ironiza sobre la gordofobia.
La poliamorosa realidad
Recuerdo que un día mi padre me llamó “golfa”. Yo debía tener dieciséis años y me dio durante una racha por tontear con obreros. Ahora, fíjate tú, me leo un libro y resulta que ya no soy una guarra, sino que soy poliamorosa. Ética sí, pero insana.
Locofobia
No suelo leer los comentarios. Siempre me da miedo descubrir alguna verdad que digan sobre mí que me deje tocada. Pero esta vez me alegro. Me han afeado por banalizar sobre los diagnósticos psiquiátricos. Así que escribo este artículo a modo de recordatorio para no volver a hacerlo.
Patetismo hardcore o bienvenida a la vida real
Este artículo no pretende ser esperanzador, ni alegre, ni fresco, ni veraniego. Mis fobias sociales crecen por momentos. No tengo un duro. Me siento socialmente muy presionada para hacer algo útil con mi vida y cumplo 31 años. ¡¡Socorro!! Nunca he sido yo de las que se asustan con las crisis impuestas desde fuera, pero este golpe bajo de los 30 a los 31 es tan mierdamente cliché que no me lo esperaba por nada del mundo.
No compres, adopta
Soy madre primeriza de una bolita de pelo negra. Estoy monógamamente enamorada de ella, Anais, así que os cuento los fascinantes descubrimientos que una puede llegar a hacer gracias a la maternidad perruna.
Cosas gratis, ¡¿dónde?!
Me gustaría que este artículo, en contraste con los que he escrito hasta ahora, sirviera para algo pedestre y terrenal. Me he enterado, de puro churro, ¡que la gente desempleada entra gratis al Museo Guggenheim de Bilbao! Aprovecha este descubrimiento para ver la exposición de la gran Niki de Saint Phalle.
(Me) corro (la voz)
Hasta los 19 años, sólo tenía orgasmos cuando comía patatas fritas con kétchup. Le reproché a mi madre no haberme hablado del clítoris y haberme ahorrado así el sufrimiento de los orgasmos fingidos. Ahora también sé que las personas con vagina tenemos próstata y eyaculamos. Como dice Diana Pornoterrorista, hay dos maneras de vengarnos del silencio al que han sumido a nuestros coños: corrernos a chorros y contarle esta posibilidad a todo el mundo.
Adoro a Anaïs Nin, ergo, soy una cotilla, ergo adoro a Anaïs Nin
La escritora, una de las pioneras de la novela erótica, es la tía más interesante y clara que no-conozco. Yo, por ahora sólo la conozco por sus diarios. La mujer te cuenta su vida sin florituras ni tapujos, y además queda bonito. La conocí a través de 'La club de lectura' en la que participo. Una alternativa al club de lectura en el que las chicas jóvenes permanecen prácticamente calladas, siempre a punto de decir algo que les revolotea dentro.