Una feminista no puede ser monárquica
Porque un pueblo de súbditas no es pueblo, es un reino. Irantzu Varela aporta una retahíla de razones por las que parece incompatible ser feminista y monárquica.
Porque un pueblo de súbditas no es pueblo, es un reino. Irantzu Varela aporta una retahíla de razones por las que parece incompatible ser feminista y monárquica.
Un whiskey, camarero, que aquí nadie se pone de acuerdo. Jule Goikoetxea ironiza (o no) sobre los resultados de la encuesta sobre la monarquía española que no quiso hacer el CIS
Es probable que cada republicana tenga cerca una amiga, novia, abuela, amante, madre, prima, vecina o hermana que no sabe qué votaría, si monarquía o república, en el caso de convocarse un referéndum. Ellas, las indecisas, podrían ser la clave en un futuro para lograr la III República.
En septiembre, José Felix Tezanos, presidente del Centro de Investigaciones Sociales, rechazaba preguntar por la Monarquía: ‘’Es una cuestión que no interesa a los españoles’’. Ajá.
El 40,9 por ciento de la ciudadanía votaría por la república en caso de darse un referéndum frente al 34,9 por ciento que se decantaría por la monarquía. Al analizar las respuestas por sexo, las mujeres se muestran ligeramente más propicias a preguntar y a votar en favor de la III República.
Es muy europeo esto de tener reyes. Llegar al Estado español significa para muchas personas migrantes convertirse en súbditas de unos reyes que nadie ha elegido