27S: Huelga general por Palestina
Se ha convocado el 27 de septiembre a una jornada de lucha y huelga general contra el genocidio al pueblo palestino y contra el régimen sionista.
Se ha convocado el 27 de septiembre a una jornada de lucha y huelga general contra el genocidio al pueblo palestino y contra el régimen sionista.
Ante la normalización de la violencia, Sarah Kane genera un tercer espacio liminar entre la ciudad pacífica y la ciudad ocupada, con la clara destreza de sentarnos frente al cuerpo violentado y hacernos partícipes.
Las narrativas imperantes ensalzan la decisión de adoptar criaturas como un acto ejemplar de altruismo, un sacrificio para lograr la familia anhelada o la respuesta a historias traumáticas. Las personas adoptadas con un enfoque crítico reclamamos otros imaginarios que reconozcan nuestro poder y que pongan nuestras voces en el centro.
No deja de asombrarme que sea siempre la derecha quien marque la agenda mediática, pero nunca hablemos de lo que de verdad importa. Es como vivir bajo una constante cortina de humo en la que nuestras demandas desaparecen como por arte de magia.
Las pintadas son una forma de protesta heredada que no cabe en los marcos de la legalidad activista y que justo por eso nace en contextos de profunda represión.
Mientras el verano se ha convertido en una época de consumo de tiempo por excelencia, salir al fresco cuando baja el sol es una costumbre contracorriente que aporta sosiego en una época de euforia planificada.
La moda, lo creo relativamente, puede ser revolucionaria. Romper “la norma” en los espacios cotidianos, con la gente cercana, es una ruptura de la que no se vuelve. Y romper con una norma tan arbitraria como la del género es una brecha en la estructura de este sistema.
Nos ordenan abrir la boca para comer, sin una ligera pregunta de qué nos ocurre, y, sin embargo, quieren que nos mantengamos con los morros prietos para que no contemos nada de la violencia que hemos sufrido y sufrimos.
Quan vam acordar que li assignaríem "gènere no-binari" i li parlaríem amb terminacions neutres, ens vam treure un pes de sobre. No ens sentíem còmodis pensant que ens tocaria criar "un nen" o "una nena". Com s’imposa el mandat de gènere a una persona que no saps on situar? El que vindrà a continuació et sorprendrà.
La gordofobia está presente en todos los aspectos de nuestra vida, y sí, lo está también en nuestras camas. Este mes hablamos de sexualidad desde lo incómodo, lo gordo y lo cuir, para pensar en un orgullo gordo que se atreva a amar a pesar del miedo, el odio y la vergüenza corporal.
Cándidas, bifobia y omnipotencia 'new age'
Ojalá que las muertes en Melilla, en el mar Mediterráneo, en las cárceles y en los CIES formen parte de esta memoria colectiva que reivindica el Orgullo, porque también son nuestras muertas y tienen los mismos responsables.
Siento nostalgia de los tiempos adolescentes en los que la categoría política de mujer se sentía tan mía como mi propio nombre. Ahora siento que la llevo a rastras. Dicen mujer y no me hablan a mí.
Guerras, conflictos y crisis pueden tener un impacto especialmente duro en la vida de mujeres, niñas y cuerpos feminizados, donde uno de los mayores riesgos a los que se enfrentan es la violencia de género.
¿El auge del K-Pop me hace más deseable? Después de crecer deseando ser blanca, deseando gustar, ahora que el consumo de contenido asiático ha subido soy, de repente, deseable. Un fetiche racial.
En este viejo continente, siempre es más fácil echar la culpa al otro que asumir las propias responsabilidades de los resultados electorales, siempre tenemos el recurso de la migración para salir del atolladero.
Vivimos en la era del salutismo. Una era en la que la búsqueda de la salud individual se ha convertido en una obsesión, y socialmente buscamos estar saludables por encima de todo. Pero se nos olvida que nuestras vidas están en manos de otros, y que poco podemos hacer individualmente frente a un modelo social que nos impone sus normas y pautas. Intentar salvarnos a nosotras mismas no va a funcionar.
Hay sujetos que, como señalaba Spivak, pareciera que aún no pueden hablar, no porque no tengan voz, sino porque no tienen espacio en el discurso hegemónico.
“Txoni” estigma langile klaseko emakume gazteen gaineko dispositibo patriarkala da; horien sexualitatea modu determinatuan bizitzeko eta espazio publikoaren erabilera moderatua egozteko aplikatzen dena. Berorrez apropiatzeak dakarren ahalduntze feminista dugu mintzagai.
No podemos utilizar los mismos discursos ni las mismas herramientas para defendernos del sistema heteropatriarcal, que todavía nos aplasta, que para defendernos de otras situaciones violentas.